- LOS ENCIERROS DE SAN FERMÍN
Por su gran interés didáctico e informativo, y con el fin de facilitar y potenciar el conocimiento de la fiesta de los toros, reproducimos con admiración y respeto parte de la obra de la Junta de Andalucía. Consejería de Gobernación. Dirección General de Espectáculos Públicos, Juego y Actividades Recreativas. Cuadernos de Aula Taurina: Otras Tauromaquias, por D. José María Martínez Parras. Sevilla, 2007.
ENCIERROS DE SAN FERMÍN
Constituyen, quizás, el espectáculo taurino más conocido internacionalmente, debido sobre todo a la difusión que de ellos hizo el escritor estadounidense Ernest Heminway. Se celebran desde día 7 al 14 de julio a las 8 de la mañana. En el encierro se corren los toros de la corrida que se celebrará por la tarde, arropados por una parada de cabestros y los pastores que van con sus varas detrás. Suele durar unos dos o tres minutos y el recorrido tiene algo más de 800 metros y transcurre entre los corrales que se instalan en la Cuesta de Santo Domingo y la plaza de toros. Las personas que corren el encierro llegan de todas las partes del mundo.
Poco antes del comienzo del encierro, los mozos se encomiendan a una imagen del patrón colocada en una hornacina situada en la calle Santo Domingo, cantando tres veces una canción que dice: "A San Fermín pedimos, por ser nuestro patrón, nos guíe en el encierro dándonos su bendición".
Luego un cohete avisa de que los portones de los corrales se han abierto, e inmediatamente después otro indica que ya están los toros en la calle, que es cuando empieza de verdad el encierro.
Al peligro que tiene correr delante de los toros, se añade el problema de que son muchos los corredores que participan en el encierro, por lo que hay que estar muy atento para no tropezarse o ser derribado por otros. La masificación es especialmente grave durante los fines de semana. Cuando todos los toros están ya en la plaza se lanza un tercer cohete y el último cuando todos han entrado en los corrales.
Hacer todo el recorrido corriendo es imposible, por lo que, los corredores corren un determinado tramo. Lo primero es acercarse a los toros. Para ello, hay que empezar a correr antes de que lleguen los toros , primero despacio y después mucho más rápido. Una vez situado en el lugar elegido, el corredor aguanta delante de los toros y más o menos cerca de los cuernos, hasta que, ya sin fuerza para continuar, se aparta de la forma más limpia posible y procurando no perjudicar al resto de corredores.
Cada tramo del recorrido tiene características propias y los corredores suelen especializarse en una u otra zona. Lógicamente, al principio del recorrido los toros van más rápidos que al final del mismo.
A veces, en el callejón de entrada a la plaza y debido a su estrechez, se producen choques entre tos corredores que provocan caídas en cadena y tos consiguientes tapones de gente amontonada que cierran del todo el recorrido. Estos "montones" producen situaciones de gran riesgo pues los toros suelen saltar por encima o se dan la vuelta y salen a la calle otra vez.
Inmediatamente detrás de tos toros corren los pastores que van provistos de varas. Son tos encargados de velar porque los toros lleguen a la plaza de la mejor manera posible. Una vez los toros en el ruedo, entran en acción los dobladores cuya función es llevar los toros al toril a punta de capote.
Existen unas normas no escritas para correr que deben seguirse como: no citar ni tocar a los toros ya que se distraen; abrirse en abanico al llegar a la plaza y saltar la barrera o quedarse pegado a ella; no levantarse en caso de caerse sino quedarse quieto en el suelo, boca abajo, sin moverse y protegiéndose la cabeza con las manos, hasta que pase la manada. Los toros en esos momentos si ven en el suelo un bulto, le pasarán por encima. Cuando todo haya pasado alguien le dará una palmada para que sepa que ya puede levantarte. Es tradicional llevar al toro a punta de periódico , aunque , a veces, su uso puede provocar situaciones peligrosas.
La noche anterior, los toros que intervienen en el encierro deben ser trasladados desde los corrales donde se encuentran desde que llegaron a Pamplona -los corrales del Gas- hasta los de Santo Domingo, de donde empieza el encierro. Es el denominado "encierrillo" que tiene unos 440 metros de recorrido y se lleva a cabo en silencio y sin corredores, sólo la manada con los cabestros y pastores detrás, lo que contrasta con el bullicio de los encierros de la mañana.
Con relación al origen de los encierros , en un principio , se trataba sólo de llevar los toros de la corrida desde los corrales, que estaban fuera de la ciudad , hasta la plaza. En fecha indeterminada los carniceros, gremio encargado de conseguir el ganado, empezaron a acompañar a los pastores en el trabajo de llevar a los toros y cabestros hasta la plaza. Con el tiempo se popularizó el entretenimiento y se empezó a correr delante de los animales y no detrás como hasta entonces y como siguen haciendo los pastores del encierro actualmente, aumentando con el tiempo el número de corredores hasta convertirse en el espectáculo que es hoy .