SALTO DEL TRASCUERNO
Este salto consiste en pasar el lidiador de un brinco por entre las astas del cornúpeto, y se ejecuta en la forma siguiente:
Sale el diestro a cuerpo limpio, o cuando más con un capote recogido sobre uno de los brazos en dirección al toro como para hacer un recorte, tomándolo sesgado y procurando que conozca su viaje, y al llegar al centro de la suerte y con la salida tapada, al humillar la res para engendrar la acción ofensiva el torero salta, esquivando la cabezada.
El diestro, en su movimiento de avance, irá deteniendo o acelerando éste, según las facultades de su adversario para llegar al centro de la suerte atravesado y con la salida tapada.
Este salto, que algunos juzgan puede efectuarse con todos los toros, no es conveniente que se lleve a cabo con los toros de sentido, con los que se ciñen o con los burriciegos que ven bien a largas- distancias y poco o nada desde cerca.
Con los demás, caso de intentarla, debe el diestro procurar que sea en el estado de levantados ó á poco de haber salido de los chiqueros.
Entre los diestros que lo han ejecutado con gran lucimiento y precisión figuran Montes, Pablo Herráiz y Rafael Guerra "Guerrita".
En recuerdo, admiración y respeto a D. Leopoldo Vázquez y Rodríguez, Luís Gandullo y D. Leopoldo López de Saá - La Tauromaquia - 1895