IGUALAR

Consiste en ponerse frente al toro, normalmente abierto, esto es, en los tercios, fuera de las tablas, para arrancar, desafiando al toro, y una vez llegados a la cabecera, meter las manos abajo y sacar el par hecho, cuajado, clavándolo por delante, realizando esa proeza que se llama "asomarse al balcón", y que no es otra cosa que mirar perpendicularmente al morrillo, de arriba abajo, para salir apoyado en los palos, cosa que pocas veces se ve y que constituye la perfecta ejecución de la suerte.

Enciclopedia Taurina: Editorial de Gassó Hnos. por José Silva Aramburu "Pepe Alegrías"