- EL TANCREDISMO -
Por su gran interés didáctico e informativo, y con el fin de facilitar y potenciar el conocimiento de la fiesta de los toros, reproducimos con admiración y respeto parte de la obra de la Junta de Andalucía. Consejería de Gobernación. Dirección General de Espectáculos Públicos, Juego y Actividades Recreativas. Cuadernos de Aula Taurina: Otras Tauromaquias, por D. José María Martínez Parras. Sevilla, 2007.
El célebre Tancredo López Martín - "D. Tancredo"
EL TANCREDISMO
A principios del siglo XX surgió una nueva modalidad del toreo cómico: el Tancredismo o Suerte del Pedestal, que tuvo gran aceptación durante algunos años. La suerte consistía en esperar, inmóvil y subido en un pedestal, la llegada del toro que, generalmente, pasaba de largo ante el regocijo del público. Debe su nombre al torero valenciano Tancredo López que fue su inventor, aunque se inspiró en una mojiganga que vio en La Habana (Cuba) y que representaba la parte final de Don Juan Tenorio. En ella, unos personajes hacían de estatuas , mientras que otros se paseaban entre las sepulturas. Cuando salía el becerro , las estatuas permanecían en sus pedestales mientras que los demás echaban a correr. Al regresar a España en 1899, realizó la nueva suerte primero en Valencia y al año siguiente en Madrid, siendo tal el éxito que obtuvo, que rápidamente se popularizó por toda España y, en seguida, surgieron imitadores por todas partes.
Fundándose en que los toros no embisten si no son hostigados, ni arremeten contra personas o cosas inmóviles, Don Tancredo esperaba al toro a la salida del toril, vestido de blanco y con la cara también pintada de blanco, simulando una estatua con los brazos cruzados en el pecho y sobre un pedestal blanco también.
La suerte se estuvo realizando con éxito durante algunos años, aunque el elevado número de imitadores produjo un cierto hartazgo entre los espectadores, lo que unido a algunas cogidas llevó a su prohibición en algunos lugares y, en definitiva, a su desaparición, aunque hoy ha resurgido y se realiza en algunos espectáculos taurinos populares.
Curiosamente, el término tancredismo se ha incorporado al lenguaje coloquial con el significado de no enfrentarse a los grandes problemas.