SUERTE A CABALLO PARADO, MALA. |
|
A caballo parado se prohíbe cualquiera suerte como desairada; que, a la verdad, en ella se percibe, más que de rejoneo, de lanzada: si el caballero lo último concibe, que en la razón, no es fácil, ajustada, note que perderá por sus despechos, al menos el caballo por los pechos. |