BANDERILLEROS
El banderillero debe poseer, asimismo, el conocimiento exacto de todas las reglas necesarias en la profesión a que se dedica, y torear en la persuasión absoluta de que, aparte del lucimiento con que las circunstancias pueden favorecer su trabajo, éste no es sino un detalle preparatorio para la labor del espada, y que ha de reunir a la agilidad indispensable un rápido golpe de vista para examinar las condiciones de las reses y torear ajustándose a ellas, corrigiéndolas y escogiendo con mirada segura el momento oportuno de entrar a clavar los arponcillos y evitar las salidas en falso, que, no estando hechas a propósito y con conocimiento, dejan aprender demasiado a los toros. Otro tanto decimos del puntillero, cuyas indecisiones son causa la mayor parte de las veces, de que se desluzca la faena del matador, teniendo éste que muletear y estoquear de nuevo.
En recuerdo, admiración y respeto a D. Leopoldo Vázquez y Rodríguez, Luís Gandullo y D. Leopoldo López de Saá - La Tauromaquia - 1895