| Referencia |
LUÍS MIGUEL DOMINGUÍN y AVA GARDNER |
| Anécdota |
Dicen que, en el año 1953, toreando una vez en la Plaza de Toros de Las Ventas del Espíritu Santo de Madrid, Luis Miguel Dominguín vio en un asiento de barrera a la escultural actriz de Hollywood Ava Gardner; ni corto ni perezoso, procedió a brindarle la muerte de un toro; como no podía ser de otra manera, la actriz quedó prendada del torero, a quien efectuó visita nocturna en la habitacion del hotel; y cuentan que al acabar la segunda "corrida", esta con tan bella dama, Luis Miguel se levantó de la cama, se duchó y vistió con impecable traje; al preguntarle doña Ava donde iba, el maestro contestó sin pestañear: A Lhardy (Restaurante-1839), a contarlo; como dicen en Italia, “se non e vero, e ben trovato”. |
| Fuente Documental |
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